Introducing Joss Stone (Joss Stone 2007)
El mercado parece saturado de cantantes femeninas que rondan los 20 años. Algún distraído puede incluso verlas u oírlas parecidas. Pero la música de Joss Stone suena muy diferente a la de sus contemporáneas. Cuando en el 2007 salió “Introducing Joss Stone” fue un paso grande en su carrera. Con él se hizo cargo de la producción ejecutiva y la composición. Por eso ella dice que prácticamente lo siente como su primer disco. Sin dudarlo es un adiós a la niña hippie rubia que cantaba covers de los 60. En este tercer disco de Stone, encontramos que realmente hace la música que le gusta y siente propia. Muy distinto a sus discos anteriores, pero la misma voz potente, capaz de gritar de felicidad o susurrar en forma cómplice. Por algunos momentos parece que el disco está sobrecargado de recursos sonoros para parecer más moderno: muchos juegos de bandejas que hacen scratch y algunos invitados que rapean. Esto no le quita mérito, pero nadie debería creer ya que el neo-soul de Joss Stone evolucionará al blues de Janis Joplin, lo cual no está mal. El disco tiene tiempo para hits radiales como “Tell Me ‘bout It” o “Head Turner”, temas más tranquilos como “Proper Nice” o “Bruised But Not Broken”, y “Baby, Baby, Baby”, un tema digno de “The Jackson Five” en el mejor momento de Motown. En cuanto a los invitados, hubiera preferido a Lenny Kravitz en lugar de Lauryn Hill. Aunque es un buen álbum, espero que el próximo contenga un poco más de soul y menos de neo.